Los Lujanes fueron una de las familias más sobresalientes del Madrid del S. XIII. Procedían de Aragón -concretamente de Huesca- y junto a otras como los Luzán, los Vargas y los Zapata contribuyeron al desarrollo de la ciudad durante la Edad Media.
Son muchos los miembros de esta familia los que se instalan en distintos barrios adoptando el nombre de la zona o parroquia a la que pertenecen. Los primeros fueron conocidos como los Lujanes de San Salvador por fijar su residencia en la plaza del mismo nombre -hoy Plaza de la Villa-.
Puerta de herradura en la calle del Codo
En 1494 Pedro Luján construye un caserón de planta trapeziodal, un patio y una torre cuadrada con torreta cubierta a dos aguas cuyo aspecto recuerda el de los castillos. De estilo mudéjar tiene una puerta de herradura en la calle del Codo y otra puerta gótica en la Plaza de San Salvador con el escudo de la familia.
La casa es heredada por los hijos de Pedro, Álvaro y Juan quienes la dividen en dos viviendas. Sus herederos habitaron en ellas hasta bien entrado el S. XVIII. Fue en 1670 cuando se concedió a Fernando Luján y Robles el título de Conde de Castroponce, nombre que se perpetuará a los descendientes de esta noble familia.
La traidición dice que en su torre estuvo prisionero el rey de Francia, Francisco I tras ser capturado en la batalla de Pavía en 1525. Durante el reinado de Fernando VII, la torre albergó las instalaciones del telégrafo óptico de la línea Madrid- Aranjuez, ya que por aquél entonces era uno de los edificios más altos de la villa.
En 1864 el Ministerio de Fomento adquiere la casa para alojar distintas instituciones: la Real Academia de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, la Real Sociedad Económica Matritense de Amigos del País y la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.
Sin embargo, durante estos años se acometieron distintas reformas que desvirtuaron la arquitectura original. En 1919 el Ayuntamiento decidió trasladar la Hemeroteca Municipal a la Casa de los Lujanes y encargó al arquitecto Luis Bellido González que restaurara los inmuebles con el objetivo de recuperar los elementos arquitectónicos iniciales.
Todavía recientemente se han llevado a cabo reformas tanto en su estructura como en las instituciones que alberga. En 1983 la Hemeroteca fue trasladada al Cuartel de Conde Duque y en 1997 el arquitecto Fernando Chueca Goitia rehizo el interior de esta casa para adaptarla a las necesidades de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.
Más información en «Guía de los palacios y edificios singulares del Madrid de 1868» de José Ignacio Pozuelo González.
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